¿Alguna vez te has encontrado en la incómoda situación de haber dejado las llaves puestas por dentro y no poder acceder a tu propia casa? Si te ha pasado, seguramente se haya apoderado de ti un sentimiento de frustración y ansiedad y te preguntes cómo ha podido ocurrir.
Pero no te preocupes, porque te sorprendería saber lo común que es este problema y la cantidad de personas que han pasado por exactamente la misma situación que tú.
Entendemos lo incómodo y estresante que puede ser este escenario, pero queremos asegurarte que hay soluciones efectivas y seguras disponibles para superar este obstáculo. Como cerrajeros expertos en seguridad, hemos enfrentado estos casos en numerosas ocasiones y hemos desarrollado las habilidades y el conocimiento necesarios para abordar este problema con confianza.
Por eso, en este artículo te enseñamos todo lo que necesitas saber sobre las herramientas necesarias y los pasos a seguir para conseguir abrir una puerta cerrada con la llave por dentro.
¿Se puede abrir una puerta con la llave echada?
Es una pregunta común que surge principalmente cuando nos encontramos en la situación de haber dejado las llaves puestas por dentro y estamos buscando desesperadamente una solución.
Por suerte, la respuesta es sí, se puede abrir una puerta con la llave echada desde el interior. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la dificultad varía según el tipo de cerradura y la habilidad de la persona que realiza la apertura.
Eso sí, es nuestro deber advertirte que no es una tarea fácil y el riesgo de dañar la puerta y la cerradura es muy alto si no se tienen los conocimientos necesarios. Es por eso que lo mejor es llamar a un cerrajero especializado para abrir la puerta con la llave por dentro de forma segura.
Si aún así quieres intentarlo por tu cuenta, sigue leyendo nuestro artículo para saber los pasos a seguir para proceder a su apertura y qué herramientas necesitas para ello.
Cómo abrir una puerta con la llave puesta por dentro
Abrir una puerta cerrada con llave por dentro puede parecer una tarea complicada, pero conociendo las herramientas adecuadas y siguiendo los pasos correctos, podrás resolver este inconveniente más fácilmente.
En los siguientes apartados vamos a explicarte cuáles son las herramientas necesarias y los pasos a seguir para abrir una puerta con la llave puesta por dentro.
Herramientas necesarias
Para abrir una puerta cerrada con llave por dentro, necesitarás algunas herramientas específicas. Estas son las más comunes y útiles en esta situación:
- Tarjeta de plástico o de crédito. Puede utilizarse en cerraduras de resbalón, aunque no siempre es la opción más efectiva.
- Ganzúas. Estas herramientas son diseñadas para manipular los mecanismos internos de la cerradura y facilitar su apertura.
- Llave de percusión o bump key. Una llave especialmente diseñada para abrir cerraduras al aplicar un golpe específico.
- Destornillador. Útil para desmontar la cerradura si es necesario, aunque no es la opción preferible.
- Taladro. En casos extremos, se puede utilizar para destruir la cerradura y acceder al interior, pero esto dañará irreversiblemente la cerradura.
- Linterna. Facilita la visualización del interior de la cerradura durante el proceso de apertura.
Pasos para abrir una puerta cerrada con llave por dentro
Sigue estos pasos para abrir una puerta con la llave echada:
1. Identifica el tipo de cerradura
Examina la cerradura para determinar a qué tipo de cerradura te estás enfrentando. Esto te ayudará a elegir el método de apertura más adecuado.
2. Selecciona el método de apertura
En función del tipo de cerradura, decide cuál será el método de apertura que utilizarás. Por ejemplo, si tienes una cerradura de resbalón, puedes intentar utilizar una tarjeta de plástico, mientras que para cerraduras de cilindro, las ganzúas o la llave de percusión serían más adecuadas.
3. Prepara las herramientas
Asegúrate de tener todas las herramientas necesarias a mano antes de comenzar el proceso de apertura.
4. Aplica el método de apertura
Realiza el proceso de apertura siguiendo las técnicas específicas del método que hayas elegido. A continuación se describen algunas técnicas básicas para cada método:
- Tarjeta de plástico. Desliza la tarjeta entre el marco de la puerta y el pestillo, intentando empujar el resbalón hacia adentro para liberar la puerta.
- Ganzúas. Introduce la ganzúa en la cerradura y manipula los pistones o pernos para alinearlos correctamente y permitir el giro del cilindro.
- Llave de percusión. Inserta la llave de percusión en la cerradura y aplica un golpe rápido y firme con un objeto contundente (como un martillo) para forzar el movimiento de los pistones y abrir la cerradura.
- Destornillador. Si es necesario desmontar la cerradura, utiliza un destornillador para quitar los tornillos que sujetan la cerradura en su lugar. Ten en cuenta que este método puede ser más complicado y no es la primera opción a considerar.
- Taladro. Si todos los demás métodos fallan, puedes recurrir al taladro. Asegúrate de perforar en el centro de la cerradura y de no dañar la puerta ni el marco en el proceso.
5. Verifica el estado de la cerradura y la puerta
Una vez que hayas logrado abrir la puerta, inspecciona la cerradura y la puerta para asegurarte de que no hayan sufrido daños. Si has utilizado un método invasivo, como taladrar la cerradura, es probable que necesites reemplazarla.
6. Repara o reemplaza la cerradura si es necesario
Si la cerradura ha sido dañada durante el proceso de apertura, asegúrate de repararla o reemplazarla lo antes posible para mantener la seguridad de tu hogar. Si no te sientes del todo cómodo realizando esta tarea, solicita ayuda profesional.
En caso de que esta no sea la causa, pero la cerradura no abre por fuera, conoce las posible causas y soluciones en nuestra publicación.
Hasta aquí nuestra guía sobre cómo para abrir una puerta con la llave dentro. Como ves, es posible su apertura pero se necesitan ciertas habilidades y herramientas específicas.
Como te comentábamos anteriormente, ante estas situaciones lo mejor es contactar con un cerrajero profesional para que te ayude.
De esta forma no sólo ahorrarás tiempo, sino que evitarás dañar la puerta o la cerradura de forma irreparable, un riesgo al que te expones si intentas abrir la puerta por tu cuenta sin la experiencia necesaria.
Si es tu caso, no dudes en contactar con nosotros a través de nuestro formulario de contacto o llamándonos por teléfono.