En este post te vamos a contar todo sobre qué hacer si quieres abrir una puerta pero la cerradura no abre por fuera.
Si alguna vez te has encontrado en esta situación sabrás lo frustrante que puede ser. Pero no te preocupes, como cerrajeros expertos vamos a guiarte a través de los pasos que debes seguir, las posibles causas y las posibles soluciones si una cerradura no abre por fuera.
Por qué la cerradura no abre por fuera
Existen varias razones por las que una cerradura puede no abrir desde fuera. Aquí, exploramos en detalle algunas de las causas más comunes y cómo identificarlas.
Ranura obstruida
Una de las causas más comunes si una cerradura no abre por fuera es que la ranura de la cerradura esté obstruida. Puede que la cerradura tenga suciedad, polvo, pelusas u otros materiales que estén bloqueando la entrada de la llave.
En este caso, se puede intentar limpiar la cerradura con un cepillo o un soplador de aire comprimido para quitar la obstrucción.
Pasadores desplazados
Los pasadores son los mecanismos internos de la cerradura que se mueven cuando se inserta la llave. Si uno o más pasadores se desplazan de su posición original, la cerradura puede no abrir correctamente.
Esto puede suceder debido al uso frecuente, a intentos de forzar la cerradura o a golpes fuertes. En este caso, es necesario llamar a un cerrajero para que reajuste los pasadores y arregle la cerradura.
Desajuste de las bisagras
Si la cerradura no abre por fuera aunque la llave gire con facilidad, puede que el problema sea el desajuste de las bisagras de la puerta.
Si la puerta se encuentra desalineada, puede ejercer presión sobre la cerradura, lo que impide que funcione correctamente.
Para solucionar esto, es necesario ajustar las bisagras para que la puerta se alinee correctamente.
Cilindro dañado o desgastado
El cilindro es la parte central de la cerradura donde se inserta la llave. Con el tiempo y el uso frecuente, el cilindro puede desgastarse o dañarse, lo que dificulta la apertura de la cerradura desde fuera.
Si la llave gira en el cilindro pero no abre la puerta, o si has notado un deterioro gradual en el funcionamiento de la cerradura, es posible que el cilindro esté dañado o desgastado.
Llave incorrecta o dañada
A veces, el problema puede ser simplemente que estás utilizando la llave incorrecta o que la llave que estás utilizando está dañada.
Las llaves pueden desgastarse con el tiempo, lo que dificulta su correcto funcionamiento en la cerradura.
Si tienes varias llaves para la misma cerradura, prueba con otra llave antes de asumir que el problema es la cerradura en sí.
Problemas con el pestillo o el cerrojo
En algunos casos, el problema puede no estar relacionado directamente con la cerradura, sino con el pestillo o el cerrojo que se extiende desde la cerradura hacia el marco de la puerta.
Si el pestillo o cerrojo están atascados, desalineados o dañados, es posible que no puedas abrir la puerta desde fuera incluso si la llave gira correctamente.
Observa si el pestillo o cerrojo se mueven correctamente cuando giras la llave y verifica si hay obstrucciones o daños visibles en estas partes.
Intentos de robo o manipulación
En ocasiones, la cerradura puede no abrir desde fuera debido a que alguien ha intentado forzarla o manipularla. Los intentos de robo o vandalismo pueden causar daños en la cerradura, lo que dificulta su funcionamiento.
Si sospechas que alguien ha intentado entrar en tu propiedad, es fundamental contactar a un cerrajero profesional y a las autoridades pertinentes.
Solución para una cerradura que no abre desde fuera
Si tu cerradura no abre por fuera, es importante seguir un enfoque metódico para solucionar el problema.
Aquí te presentamos algunas soluciones que puedes intentar según las causas que hayamos identificado anteriormente.
Limpia y engrasa la ranura
Si la ranura de la cerradura está obstruida, el primer paso es limpiarla y lubricarla. Utiliza un paño húmedo o un cepillo pequeño para eliminar el polvo, la suciedad y cualquier objeto visible en la ranura.
Luego, aplica un lubricante específico para cerraduras en aerosol en la ranura y en la llave.
Inserta y gira la llave varias veces para distribuir el lubricante en el interior de la cerradura, lo que facilitará su funcionamiento.
Ajusta o reemplaza los pasadores
Otra de las posibles causas si una cerradura no abre por fuera es que los pasadores estén desplazados. En este caso es posible que necesites ajustarlos o reemplazarlos. Desmonta la cerradura con cuidado y examina los pasadores y los muelles en su interior.
Si encuentras alguna pieza dañada o desplazada, es posible que debas reemplazarla o ajustarla para que la cerradura funcione correctamente. Si no te sientes seguro de hacerlo tú mismo, contacta a un cerrajero profesional.
Ajusta las bisagras de la puerta
Cuando el problema está relacionado con las bisagras desajustadas, es necesario ajustarlas para que la puerta y la cerradura se alineen correctamente.
Verifica si los tornillos de las bisagras están flojos y apriétalos si es necesario.
Si las bisagras están desalineadas, es posible que debas desmontarlas, reajustarlas y volver a colocarlas correctamente. En casos extremos, quizás sea necesario reemplazar las bisagras por completo.
Repara o reemplaza el cilindro
Si el cilindro de la cerradura está dañado o desgastado, es posible que sea necesario repararlo o reemplazarlo. En algunos casos, puede ser suficiente con limpiar y lubricar el cilindro, pero en otros, puede ser necesario reemplazarlo por completo.Utiliza una llave en buen estado
Si el problema es una llave incorrecta o dañada, asegúrate de utilizar una llave en buen estado que funcione correctamente con la cerradura.
Si todas tus llaves están desgastadas, es posible que debas solicitar una copia nueva a partir del código de la cerradura o de una llave en buen estado.
Repara o reemplaza el pestillo o el cerrojo
Si el problema está en el pestillo o cerrojo, es posible que sea necesario repararlos o reemplazarlos. Puedes intentar ajustar el pestillo o cerrojo si están desalineados, pero si están dañados, es recomendable reemplazarlos.
Aprieta los tornillos de la cerradura
Si la cerradura está floja o mal posicionada, es posible que los tornillos que la sujetan estén sueltos. Comprueba los tornillos y apriétalos si es necesario. Asegúrate de que la cerradura esté bien sujeta y en la posición correcta antes de intentar abrir la puerta nuevamente.
Consulta a un cerrajero profesional
Si has intentado todas las soluciones anteriores y aún no puedes abrir la cerradura desde fuera, lo más recomendable es consultar con un cerrajero especialista en apertura de puertas.
Este profesional podrá diagnosticar el problema con precisión y ofrecerte la solución más adecuada para tu situación.
Qué NO hacer si la cerradura no abre por fuera
Cuando te enfrentas a una cerradura que no abre desde fuera, puede ser tentador probar diferentes métodos para intentar solucionar el problema rápidamente.
Sin embargo, hay ciertas acciones que debes evitar, ya que pueden causar daños adicionales en la cerradura, la puerta o incluso poner en riesgo tu seguridad.
Aquí te presentamos algunas de las cosas que NO debes hacer en esta situación.
Uso de tarjetas
Es posible que hayas visto en películas o series de televisión cómo las personas usan tarjetas de crédito u objetos similares para abrir cerraduras.
Aunque puede funcionar en algunas situaciones muy específicas, intentar este método si la cerradura no abre por fuera no sólo es ineficaz, sino que también puede dañar tanto la tarjeta como la cerradura o el marco de la puerta.
Forcejeo de la cerradura
Forzar la cerradura aplicando presión excesiva con la llave o utilizando herramientas inadecuadas puede dañar aún más la cerradura y hacer que sea más difícil solucionar el problema. Además, podrías dañar la llave, lo que complicaría aún más la situación. En lugar de forcejear, es mejor seguir las soluciones recomendadas o contactar a un cerrajero profesional.
Ejercer fuerza en la llave
Si la cerradura no abre por fuera, al intentar abrirla nunca debes aplicar demasiada fuerza en la llave. Si la llave no gira fácilmente, es probable que haya un problema con la cerradura que no se resolverá ejerciendo más fuerza.
Forzar la llave puede causar que se rompa dentro de la cerradura, lo que complica aún más la situación y puede requerir la intervención de un cerrajero para extraerla.
Introducir herramientas en la ranura
A menos que seas un cerrajero profesional, no debes intentar introducir herramientas o instrumentos en la ranura de la cerradura para solucionar el problema. Hacerlo puede dañar los componentes internos de la cerradura y hacer que sea aún más difícil de reparar.
Además, si no sabes lo que estás haciendo, podrías empeorar el problema y posiblemente bloquear la cerradura de forma permanente.
En resumen, si te encuentras en una situación en la que tu cerradura no abre por fuera, es importante mantener la calma y seguir los pasos y consejos mencionados en este post.
En última instancia, recuerda que si no puedes solucionar el problema por ti mismo lo mejor es recurrir a un profesional.
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